Hoy en día casi todas las comunicaciones se realizan por medios electrónicos. Ya sea que hablemos con alguien telefónicamente, enviemos un mensaje por email o utilicemos el Internet para realizar cualquier tipo de actividad, existe uno o más procesos electrónicos que se llevan a cabo y que pueden de alguna forma ser monitoreados. ¿Cómo hacer para estar seguros que la información que intercambiamos con otros se mantenga privada, no sea fraguada o modificada, o finalmente que el “otro” en el extremo del canal de comunicación no sea un impostor?